La salud y el bienestar de nuestras queridas mascotas son prioridades indiscutibles para quienes las consideramos parte de la familia, sin embargo, a menudo nos enfrentamos a desafíos médicos que pueden poner en peligro la vida de nuestros compañeros peludos.

Un claro ejemplo de estos peligros y enfermedades es la piometra, una afección bastante común en las gatas, pero que en la mayoría de las ocasiones no recibe la atención que merece.

En Skoon queremos que tu mascota se encuentre en buen estado de salud, motivo por el cual, en este artículo, exploramos a detalle esta enfermedad que afecta con gran frecuencia a las gatas, comprendiendo sus síntomas y conociendo sus principales tratamientos.

Introducción a la piometra en gatos

La piometra es una enfermedad uterina que puede afectar a las gatas no esterilizadas y, en ocasiones, incluso a aquellas que han sido sometidas a una esterilización tardía o incompleta.

Esta afección se caracteriza por una infección del útero que da como resultado la acumulación de pus en su interior, creando un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y la infección.

A pesar de su prevalencia, la piometra en gatos tiende a pasar desapercibida en sus primeras etapas debido a la falta de síntomas evidentes, es por eso que la educación sobre esta condición es esencial para garantizar la salud y la longevidad de nuestras mascotas felinas.

Causas y síntomas de la piometra en felinos

Aunque las causas exactas de la piometra en gatos no están completamente claras, se cree que dicha condición se encuentra relacionada con cambios hormonales en el ciclo reproductivo de la gata, así como con otros factores que te compartimos a continuación:

Efecto de la progesterona

Durante el ciclo reproductivo de una gata, los niveles de progesterona aumentan, esto provoca que las paredes del útero se vuelvan más gruesas y propensas a la acumulación de líquido y pus.

Gatas no esterilizadas

La piometra es más común en gatas que no han sido esterilizadas, ya que la exposición continua a los cambios hormonales durante los ciclos estrales aumenta el riesgo de desarrollar dicha afección.

Factores genéticos

Algunos estudios sugieren que la predisposición genética puede influir en la susceptibilidad de una gata a la piometra.

Infecciones previas

Infecciones uterinas previas o inflamaciones pueden aumentar el riesgo de desarrollar dicha condición.

Los síntomas de piometra en gatos llegan a variar, pero entre los principales se encuentran los siguientes:

• Uno de los signos más notorios es una secreción vaginal purulenta y maloliente.
• Las mascotas afectadas suelen beber más agua de lo normal y orinar con mayor frecuencia.
• La piometra hace que la mascota se sienta débil y apática.
• Existe una falta de interés en la comida.
• El abdomen puede aumentar de tamaño debido a la acumulación de pus en el útero.
• La infección uterina provoca fiebre en la mascota.

Es fundamental destacar que, en algunos casos, la piometra se desarrolla de manera silenciosa, sin mostrar síntomas evidentes en sus primeras etapas, esto subraya la importancia de realizar exámenes de rutina y estar atentos a cualquier cambio en el comportamiento o la salud de nuestras mascotas.

Comparación entre piometra felina y canina

La piometra es una preocupación de salud seria tanto en perros como en gatos, pero existen algunas diferencias notables entre cómo afecta a estas dos especies, las cuales te compartimos a continuación:

Piometra canina

• Los síntomas de la piometra canina son más evidentes y fáciles de reconocer debido a la anatomía uterina.
• El diagnóstico de la piometra en perros se efectúa mediante radiografías o ecografías para confirmar la presencia de pus en el útero.

Piometra felina

• Las gatas tienen un útero bífido (dividido en dos cuernos), lo que hace que la piometra en gatas sea más complicada de diagnosticar y tratar.
• Los síntomas suelen ser más sutiles y difíciles de reconocer.
• El diagnóstico de la piometra en gatas requiere de pruebas más exhaustivas, como endoscopias o análisis de sangre.

Diagnóstico de la piometra en gatos

Ahora que sabes qué es piometra y sus diferentes síntomas, es crucial conocer las diferentes maneras en las que se lleva a cabo el diagnóstico de la piometra en estos felinos.

Aquí te compartimos algunas formas de realizar su diagnóstico:

• Análisis de laboratorio
• Ecografía abdominal
• Radiografías
• Análisis de contraste
• Endoscopía

Tratamiento de la piometra en gatos

El tratamiento de la piometra en gatos es una preocupación médica urgente, ya que esta afección puede poner en peligro la vida de la mascota, siendo indispensable acudir al veterinario para que reciba el mejor tratamiento.

Entre las opciones de tratamiento para piometra en gatos se encuentran:

Tratamiento farmacológico

El tratamiento farmacológico es una opción que se considera en estos casos, especialmente en situaciones en las que la afección no es grave o moderada y la cirugía inmediata no es una opción.

Ovariohisterectomía (Esterilización)

La Ovariohisterectomía, comúnmente conocida como esterilización o “castración”, es el tratamiento principal y más efectivo para tratar la piometra en gatos, este procedimiento implica la extirpación completa del útero y los ovarios de la gata, lo que elimina la fuente de la infección y previene futuros episodios de piometra.

Prevención y cuidados post-tratamiento

A continuación, te describimos las medidas preventivas y los cuidados posteriores al tratamiento que se deben tener en cuenta:

Prevención

La mejor manera de prevenir la piometra en gatos es la esterilización temprana, lo que implica la extirpación del útero y de los ovarios, eliminando la posibilidad de que la gata desarrolle esta enfermedad.

Este procedimiento, además de ser una excelente forma de cómo curar piometra en gatos, también tiene otros beneficios, como la reducción del riesgo de cáncer uterino y mamario, así como el control de la población de gatos.

Piometra después de la cirugía

Después de que una gata ha sido tratada por piometra, es importante brindarle cuidados adecuados durante su proceso de recuperación, algunos de ellos son:

• Seguimiento: Es fundamental programar consultas de seguimiento con el veterinario para evaluar la recuperación y prevenir complicaciones.
• Medicación: Administrar medicamentos recetados por el veterinario, especialmente después de una ovariohisterectomía, para controlar el dolor y prevenir infecciones.
• Alimentación: Proporcionar una dieta equilibrada según las recomendaciones del veterinario para apoyar la recuperación.
• Descanso y confort: Ofrecer un lugar cómodo y tranquilo para el descanso, evitando el estrés y la actividad excesiva.

Conclusión: Importancia de la detección temprana y consulta veterinaria

Como mencionamos previamente, la piometra en gatos, junto con sus variados síntomas, puede derivar en una grave condición de salud si no se aborda a tiempo, poniendo en peligro la vida de tu mascota.

Por ello la importancia de acudir de manera regular al veterinario, ya que la detección precoz de los diferentes síntomas de la piometra y la pronta atención veterinaria son esenciales para garantizar un tratamiento exitoso.