Presentar a tu michi es tarea sencilla si lo haces correctamente, recuerda que por naturaleza los animales son territoriales así que no es buena idea imponerles un nuevo integrante en la manada.
El punto es que ellos crean que están eligiéndolo como parte de su familia, cuando en realidad eres tú introduciendo poco a poco a su nuevo compañero en su espacio.
Lo más normal es que la mascota que tiene más tiempo en casa quiera ser el dominante por encima del nuevo integrante, pero con el paso del tiempo irá aceptando a su nuevo “hermano”.
Primeros pasos
Mantenlos separados
Los primeros 4 días no es recomendable que intentes que convivan armoniosamente. Procura tener a michi en una habitación diferente, en lo que ambos comienzan a aceptar la presencia del otro.
No olvides dejarle en su habitación provisional lo necesario como plato con agua, comida y un arenero.
Intercambia artículos con su olor
Cuando consideres que sus pertenencias como juguetes, mantas y rascadores ya tienen impregnado su aroma, es momento de intercambiarlos.
Esto se realiza con el fin de que ambos empiecen a identificar sus olores para que cuando estén juntos ya ubiquen y acepten a su nuevo amigo.
Si notas que alguno d ellos dos comienza a enojarse o angustiarse convierte esa experiencia en algo positivo proporcionándole su premio favorito.
Hora de mudarse
Una vez que acepten el olor del otro deberán explorar el lugar en el que ha estado viviendo el nuevo integrante de la familia.
El nuevo michi tendrá que vivir por un par de días en el espacio de tu mascota más antigua y viceversa.
¡Listos para conocerse!
Esta es una de las últimas etapas y la que te dará el veredicto final para saber si ya pueden convivir en completa armonía y libertad.
Para presentar a tu michi necesitas que el nuevo esté dentro de una transportadora o de menos que haya alguna barrera que los divida, porque no sabemos cuál vaya a ser su reacción.
Lleva al nuevo gatito al espacio de tu mascota con más tiempo y deja que se conozcan oliéndose, haciendo ruidos e incluso hasta erizándose.
Es normal que esto suceda, sino se calman al paso de unos minutos, es indicador que aún no están listos para interactuar libremente.
Este ejercicio podrás repetirlo las veces que sean necesarias.
Libres como el viento
Si ya pasaron la etapa anterior y crees que ya es momento de presentar a tu michi y que se conozcan sin necesidad de una barrera, solo debes tomar en cuenta el espacio.
Recuerda que los animales con impulsivos y nunca sabemos con certeza cómo van a reaccionar, por ello es importante que cuando los juntes para convivir tengan el espacio suficiente por si quieren huir.
Si no existen tensión o pelea es momento de dejarlos convivir libremente por toda la casa.
Con el tiempo notarás que poco a poco comienzan a acercarse y pasar más tiempo juntos, hasta volverse los mejores amigos.
¿Compartirán todo?
Verás como con el tiempo comienzan a compartir juguetes, platos de comida y hasta arenero en caso de que tu otra mascota también sea un gato.
Recuerda que siempre debes tener un arenero extra al número de gatos que tengas, por que cada uno tendrá uno como su favorito y eventualmente utilizarán el otro.
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La única arena que elimina por completo el aroma a pipí, no se aglutina lo cual favorece su limpieza y también ayuda a eliminar pulgas, garrapatas y parásitos que lleguen a estar en el pelaje de tu michi.