En la naturaleza, diferenciar entre hembras y machos muchas veces no es simple, por ende, saber cómo es el pene de un gato es una de las primeras consideraciones antes de tratar de averiguar el sexo de tu mascota, aunque muchas veces no sea posible en una primera exploración.
Aunque no se distingue a simple vista, es posible diferenciar el pene de gato de los genitales de las hembras, esto se debe a que el pene de los gatos se encuentra escondido al interior de la cavidad abdominal del animal, en la parte posterior del recubrimiento testicular, por lo que no es posible detectarlo a larga distancia y sin hacer una exploración directa.
Para distinguir el pene de los gatos, puedes acudir con un veterinario, quien gracias a su experiencia te dirá si se trata de una hembra o un macho; esto facilitará el control del ciclo reproductivo de tu mascota, en caso de que desees evitar que tenga descendencia o, al contrario, por si quieres que tenga gatitos.
Antes de todo lo anterior, debes saber que, al estar escondido en su organismo, el pene de los gatos debe ser buscado con mucho cuidado, esto con la intención de no alterar al animal y de no lastimarlo, previniendo así que rasguñe a alguien a causa de un mal manejo.
La anatomía del pene de los gatos es singular, ya que posee unas estructuras que semejan unas espinas, sin embargo, estas cumplen una función muy importante en el ciclo reproductivo de dichas mascotas.
El tamaño del pene de un gato es pequeño en proporción a su cuerpo, alcanzando apenas unos cuantos centímetros en comparación con el de otras especies, sin embargo, tiene una serie de protuberancias semejantes a pinchos que dan una apariencia inusual al pene del gato.
¿El pene de los gatos tiene espinas?
El pene de un gato puede tener alrededor de 100 a 200 espículas de 1 mm de largo, que son todas esas formaciones de queratina que recubren el miembro del macho y que tienen una apariencia similar a las espinas de las plantas.
Seguramente te estás preguntando por qué el pene de los gatos tiene espinas, la respuesta, aunque simple, es interesante, ya que las espinas ubicadas en el pene de los gatos sirven como soporte durante el apareamiento, brindando la firmeza suficiente para que el miembro pueda mantenerse dentro de la cavidad de la hembra y depositar el semen, propiciando así la fertilización.
Existen dos teorías respecto a cómo es el pene de los gatos, la primera menciona que este órgano presenta dichas espículas para rasgar el interior de la vagina de la gata y así provocar la ovulación de la hembra, lo que implica que el proceso de fertilización se lleve a cabo con éxito.
Otra respuesta a esta interrogante es que las espinas ayudan a que el gato alcance el orgasmo, de esa manera podrá arrojar el semen suficiente para hacer posible la fecundación.
El proceso de apareamiento felino es sin duda doloroso para las hembras, ya que estas espículas lastiman su cavidad interna, no obstante, aunque pueda resultar molesto, es un proceso para lo que ambos animales están adaptados biológicamente.
Para conocer más acerca del mundo de los gatos, no dejes de seguir las publicaciones del blog de Skoon, donde encontrarás mucha información de utilidad sobre estas mascotas.