Los gatos a diferencia de los perros, son el tipo de mascota que al llegar el invierno cambian su comportamiento, porque sus características físicas los vuelven más sensibles al frío.

Si bien, la mayoría de los gatos poseen un pelaje que los puede proteger del frío, eso no significa que no requieran de un poco de apoyo adicional, para mantenerse saludables y lejos de las bajas temperaturas durante esta época del año.

Es una realidad que los gatos pueden sufrir hipotermia leve a grave y hasta congelamiento, por no poder resguardarse del frío. Así que hay que prestar atención, si tu gatito sale de casa, siempre tenga la facilidad de entrar al hogar sin problema.

Sugerencias para proteger a los gatos del frío

Abrígalo con mantas en lugar de ropa

Lamerse es parte del ritual de higiene de un gato, por lo que colocarle alguna prenda como chaleco o capa, puede ser impráctico para ellos.

Te sugerimos que en lugar de poner estas prendas, optes por colocar algunas mantas en su cama y/o lugares que él visite con frecuencia, para que se mantenga caliente. Es más fácil que tu gato se acurruque debajo de la manta, en lugar de lidiar con un chaleco o capa.

Esta recomendación tiene su excepción, porque existen gatos con pelaje muy corto o sin pelaje como el esfinge que sí podrían utilizar un chaleco, para ayudarlos a mantener el calor. Todo depende de si a tu gato le gusta o no la prenda.

Vigila su alimentación y que tome líquidos

Durante épocas de mucho frío, es importante vigilar que tu gato coma adecuada y nutritivamente, sobre todo si gusta de salir de casa y regresar después de varias horas.

Al salir a pasear tu gato, es más complicado supervisar que coma y tome los líquidos suficientes, así que procura mantener su plato con comida y agua (que no esté demasiado fría), que puede consumir a su regreso.

Por otro lado, si tu felino no sale de casa, no hay necesidad de que modifiques la alimentación de tu gato, solo observar que si coma bien.

Si por alguna razón dejas un tazón de agua para tu gato afuera de la casa, siempre cuida que el agua no se congele, o este demasiado fría y/o sucia, para que tu mascota la pueda tomar sin problema.

Verifica que pueda entrar a casa sin problemas

Por lo general, cuando llega el invierno el frío provoca un cambio en el comportamiento de los gatos, prefieren quedarse en casa y buscar las zonas más cálidas, para estar acurrucados todo el día.

Sin embargo, si tu felino es la excepción a la regla y no quiere dejar de salir, te recomendamos mucho que verifiques que la puerta o ventana que utiliza para entrar de nuevo a casa, esté abierta o sea de fácil acceso para él.

Esto para evitar que tu gatito pase la noche afuera y con frío, lo que le puede provocar desde una gripa, padecer hipotermia o hasta congelamiento.