¿Cuál es el mejor desparasitante para gatos?

Los gatos son mascotas que a pesar de mostrar una personalidad independiente, son animales que precisan de cuidados extras por parte de sus dueños cuando existe la posibilidad de que hayan huéspedes en su piel, de lo contrario de tener el cuidado correcto pueden llegar a atacar tanto la piel donde habitan, causar molestias en el tracto digestivo, diarrea, pérdida de peso, pelaje seco, vómito, sangre en las heces, inflamación en el abdomen, letargo y presencia masiva de parásitos en las heces que pueden conducir a la muerte.

Por eso, para su protección, es necesario que el gato tenga todas sus vacunas en orden y los desparasitantes, lo ideal es que los primeros 4 meses de vida reciban su primera dosis de desparasitante para gatos, otra a las 8 semanas y luego a los 3 y a los 4 meses.

Los parásitos intestinales son de las afecciones más ordinarias en los gatos, por ello es importante mantenerlos protegidos de enfermedades comunes con sus respectivas vacunas y sus antiparasitarios. Dentro del mercado existen una gran variedad que viene en distintas presentaciones, los cuales han sido fabricados para cubrir las diferentes  personalidades de los felinos.

Una pastilla desparasitante para gatos no es un tratamiento adecuado cuando el felino huele los medicamentos a pesar de que estos sean camuflados dentro de su plato de comida, de manera que un desparasitante para gatos en pastillas puede ser un poco difícil de aplicar, pero es perfecto cuando la mascota presenta síntomas de tener pulgas o garrapatas, debido a que el medicamento desparasitante para gatos una vez ingerido viaja más rápido por el torrente sanguíneo, matando así al parásito invasivo.

Sin embargo, cuando el felino convive con niños en el hogar, el desparasitante oral para gatos o en formato de pastilla es el más idóneo a diferencia de uno que se aplica vía tópica, ya que este no precisa de mantener al gato seco en 48 horas o tener vigilancia constante con los niños para que su nariz o boca no entren en contacto con el producto, una vez aplicado en la piel de la mascota.

Antes de adquirir cualquier medicamento desparasitante para gatos es fundamental que el veterinario de cabecera del felino haga un chequeo y establezca el método correcto de acuerdo a su condición física. Existen mascotas que presentan tolerancia digestiva hacia algunos productos y lo terminan vomitando, perdiendo totalmente el efecto desparasitante.

Desparasitante para gatos casero

Un desparasitante casero para gatos es perfecto para tratar garrapatas y pulgas:

  • Vinagre de manzana: es un potente y útil repelente en donde sólo es necesario diluir dos cucharaditas en 250 mililitros de agua y rociar el pelaje de la mascota.
  • Aceite de lavanda: Con 10 gotas de este aceite con la combinación de tomillo y de citronela en 150 mililitros de agua, es idóneo para peinar al gato cuando tiene presencia de pulgas y garrapatas, además de que es un remedio casero para curar las heridas causadas por los mismos parásitos.
  • Levadura de cerveza: Este es un excelente preventivo que goza de tener vitamina B que ayuda a repeler a los parásitos.

Desparasitante natural para gatos

Por otro, las siguientes soluciones naturales ejercen la función de desparasitante y garantizan el bienestar del felino:

  • Tomillo seco molido: Es una planta segura para los gatos que puede convertirse en polvo y ser añadida en la comida del gato para desparasitarlo.
  • Semillas de calabaza naturales molidas: En el caso de la presencia de lombrices intestinales, este desparasitante natural funciona como laxante, auxiliando así al animal a expulsar los parásitos del sistema digestivo.
  • Aceite de coco: Es un excelente remedio para aliviar el picor, la sequedad de la piel, regenerar tejidos y estreñimiento causados por hongos o parásitos.

No obstante, hay que tener en cuenta que el desparasitante para gatos natural actúa de forma mucho más lenta que un producto comercial, por lo que si el felino se encuentra en condiciones graves lo mejor es consultar con un veterinario para que lleve un tratamiento más adecuado a su condición.

Ya sean collares antiparasitarios, pastillas, sprays o inyecciones, la desparasitación tiene que ser bajo cuidado, porque de lo contrario se le puede ocasionar al gato un efecto indeseado o una intoxicación.

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